jueves, 10 de diciembre de 2009

Esperando a Damien

Damien entró en nuestra vida hará cosa de un mes o un mes y pico; el hermano de un compañero del despacho –misionero en no sé dónde– nos mandó un mail, contando la historia de un muchacho africano que había crecido huérfano gracias a los odios de unos y otros por algo misterioso llamado raza. Estudió gracias a la ayuda de unos cuantos y cuando rozaba el futuro con las yemas de los dedos se acabó el dinero. Y con el dinero, las esperanzas.
No lloró, no se quejó, no escupió al cielo... Así son las cosas, se diría encogiendo los hombros.
Todo lo que le hacía falta eran doscientos cincuenta euros; doscientos euros para terminar los estudios superiores, para ser alguien.
Y así entró Damien en nuestras vidas, como un latigazo. El mail de un hermano marista, la generosidad de los compañeros del despacho y Western Union hicieron el resto. Ahora le toca a él, claro. Cabe la posibilidad de que hayamos ayudado a un fracasado, pero algo me dice que Damien terminará la carrera.


Y ahora, un mes después recibimos este paquete de África con regalos, una carta emocionada en un inglés malo y la primera felicitación navideña. Corto y pego: “no sé cómo agradecértelo, me has sacado de una fosa. Me preguntaba qué podía hacer, y tú apareciste para ayudarme. (…) En una ocasión el H. Eugenio me dijo que Dios me quiere, pero tú también me quieres porque en el mismo momento en que te expuse mi problema reaccionaste inmediatamente y Dios me puso delante personas que me quieren. Eres incomparable, no sé cómo agradecértelo. Sólo me quedaré contento cuando me convierta en un hombre, es decir cuando tenga la oportunidad de visitarte y mostrarte el fruto de tu esfuerzo”.
Desde entonces, esperamos a Damien.

13 comentarios:

Néstor dijo...

Me temo que debo aclarar que los regalos están hechos a mano, probablemente por él mismo o por su familia. La caja y los sellos se los facilitarían, con total seguridad, en la misión.

rossy dijo...

es de lo más gratificante que he leído en mucho tiempo; gracias por compartirlo!!!

Bsos!

No cogé ventaja, ¡miarma! dijo...

Felicidades por esa gran felicitación, primera, de lo que será para ti, ya seguro, una hermosa navidad.
Saludos

Nodisparenalpianista dijo...

Muy bien por Damien!!!!
Y ahora a estudiar. Oye, ¿y os otros 50 para qué eran? Llámme marujo, pero me has dejado con la intriga...

Dulcinea dijo...

Todos habeis tenido suerte, él por haber podido salir de su situación, y vosotros por tener la oportunidad de sacarlo.

Felicidades a todos.

Diosenmicalle dijo...

Enhorabuena. A ti, a tu despacho, a Damien.

Un saludo cordial

Tinta

Myriam dijo...

Bien por vosotros y por Damien esta entrada me parece de los más esperanzadora ojala que todos pudieramos ayudar un poco más los Damien de aqui y de alla

patzarella dijo...

Mmmm..., ya sé a quién pedirle !!! jajaja Un abrazo a Damien cuando hablen con él y ojalá que sea el primero de muchos Damien's... ¡Saludos abogado!

Marta dijo...

"...cuando tenga la oportunidad de visitarte y mostrarte el fruto de tu esfuerzo".

Grande lo que habeis hecho por él y con él. Esas líneas de profundo agradecimiento seguramente encierren mucho más de lo que nunca podamos llegar a imaginarnos.

TopLetrado... ¡top top top!

PS.- ¿qué tal todo?

Juanluís dijo...

Enhorabuena por la generosidad a los que formáis parte del despacho: habéis sido -quizá- "sólo" culpables de un pequeño porcentaje de la educación de Damien comparado con los misioneros, pero de un tramo tan importante que sin él la subida a la cima no hubiese sido posible.

Anónimo dijo...

Vuelvo.

"Esperando a Damien" o esperando a Néstor, que no Héctor, ni Pector.

¿Dónde te metes chiquillo?

Luisa

Nodisparenalpianista dijo...

zzzzzz

Marta Salazar dijo...

gracias x contarnos esta bonita historia!