Anoche me fui con unos amigos a ver “el partido” al Importastú, un bar de moda, mobiliario fashion y televisor de plasma descomunal. Llegué tarde –es costumbre– y muy a duras penas me hice con mis cuarenta centímetros cuadrados de espacio vital para moverme, beber y dar buena cuenta de las tapas que nos sacaban; para entonces el Real Madrid perdía 0-1, pero nunca desfallecimos: gritamos, abucheamos, cantamos y saltamos como un solo hombre (bueno, lo cierto es que el personal femenino brillaba por su ausencia).
Y el gol llegó. Saltamos y nos abrazamos. En el Importastú ya no había extraños. Y un grito: “a por ellos, oé”, mientras señalábamos con nuestras manos a la televisión. Entonces, sin darnos cuenta, la civilización murió y en cada uno surgió el irracional que llevamos dentro. Si entonces alguien nos hubiera pedido que detruyéramos en nombre del madridismo, lo habríamos hecho.
No pensamos en ello –en nada–, porque antes de que pudiéramos secarnos la frente llegó el segundo gol y con él la catarsis irracional, el festival caníval: saltamos fundidos en una compacta melé hasta golpear las lámparas con la cabeza; nos fundimos extraños y propios en abrazos de alegría y lloramos como si nos hubiera tocado el gordo de Navidad.
Y la ola y los cánticos y los gritos y el tercer gol y más abrazos y el “así, así, así ganá el Madrid” y el “otra ronda, jefa” y la voz ronca que se declaró en huelga por no poder aguantar la emoción. Y ¿qué más? Pues no sé, ese “campeones, campeones” y el “we are de champions” malamente interpretado… El irracional se había apoderado de nosotros por completo, así que cuando los jugadores dieron la vuelta de honor por el campo nos quedamos en silencio ahogando sollozos y saldando nuestras cuentas con la camarera.
Al salir una mujer mayor en bata nos preguntó quién había ganado: –los buenos, señora, los buenos.
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7 comentarios:
Genial lo del irracional de dentro. Ayer también se apoderó de nos por estos lares y con él, mantuvimos el equipo en 1ª -aunque ya tiemblo pensando en la próxima temporada ¡jaja!-. ¡¡Enhorabuena por la 30ª liga!!
Gracias Marta. Enhorabuena por el Atletic, que -pese a todo- se mantiene en 1ª.
La verdad es que casi me da envidia no ser aficionado al fútbol, ni a nada por lo que sacar de paseo al irracional que, en efecto, llevamos dentro. [A veces se escapa solito]. Visto así, ser del Madrid es toda una inversión en salud mental. Aunque yo a la señora de la bata le habría respondido que han ganado los de casi siempre. Enhorabuena, en cualquier caso.
enhorabuena!
Anuncio al mundo que el viernes juraré mi cargo profesional y me será impuesta la Toga de forma pública y solemne. Os invito a todos...
Nestor, si estuvieras por aquí, te llevaría de padrino...
Enhorabuena y gracias por el ofrecimiento pero, efectivamente, me pilla a desmano.
Lo de jurar "ejercer la abogacía de acuerdo a las normas deontológicas y respeto al resto del ordenamiento jurídico" tiene importancia real, aunque haya quienes se lo tomen a risa. Que te vaya bien todo y tu familia lo disfrute.
El domingo por la noche media España gritaba y la otra media lloraba... Bueno, a otros nos daba igual porque no entendemos de estas pasiones...
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