jueves, 4 de octubre de 2007

Alegría: retazos de Zaragoza (II)

El día empezó muy pronto. Tan pronto que, entre la conversación, el desayuno, el jamón y el pásame más café no nos dimos cuenta de que estábamos perdiendo el autobús. Solo la voz de Ataulfo a varios kilómetros de distancia me sacó del limbo del buffet del NH –“¡que esto empieza ya y tienes que defender tus conclusiones!”–, así que prisas y taxi.
La ponencia empezó conmigo dentro. El sistema había previsto que defendiera mis conclusiones por la tarde o al día siguiente, así que pude relajarme y disfrutar de las discusiones sobre la libertad y la seguridad en el estado de derecho. Dos cosas me llamaron la atención: la presencia de varios abogados con notables preocupaciones independentistas y el altísimo nivel intelectual de los que intervenían en los debates.
Por la tarde nos apuntamos Elena, Óscar, Lola y yo a un portal llamado “Menores: derechos y deberes” en el que intervenía D. Emilio Calatayud, paisano y juez de menores famoso por sus sentencias. También intervenía el llamado tío Alberto, fundador de “La ciudad de los muchachos”, un ex delincuente, “El Pera”, y la adjunta segunda al Defensor del Pueblo.
A eso de las siete y pico, cansados de tanto ajetreo intelectual, nos fuimos al hotel. Un ratillo más tarde nos fuimos a ver la Catedral, la Basílica del Pilar y el Conventillo, un local de moda donde tiran una cerveza que da gloria. Y de nuevo nos tocó correr, porque a las diez habíamos quedado para cenar en un sitio fashion de nouvelle cousin generosa. Esta vez me tocó hacer el brindis, después de una jugada sucia de Graciela (que estuvo muy fina y me pasó la pelota) y brindé por los veintisiete amigos que estábamos allí, para que nunca caiga el olvido sobre nosotros.
Y llegadas las copas, hice mutis por el foro, que todavía quedaba congreso y tenía que estar fresco.
No sé por qué, a la vuelta, me encontré canturreando una canción del Cirque du Soleil: come la rabbia di amar, alegria, come un assalto di gioia

7 comentarios:

Paco Becerro dijo...

Desde luego la jornada fue completa. Amigos, compañeros, gente notable, buena comida, brindis, mutis... tan variado como un circo... ¿a lo mejor por eso te pusiste a canturrear?

Anónimo dijo...

¿Por qué a veces pienso que sabes lo que pienso?

Nodisparenalpianista dijo...

Vigila abogado, que como FutBlog venda su secreto estás perdido.
Oye, esto suena la mar de interesante" pude relajarme y disfrutar de las discusiones sobre la libertad y la seguridad en el estado de derecho. Dos cosas me llamaron la atención: la presencia de varios abogados con notables preocupaciones independentistas y el altísimo nivel intelectual de los que intervenían en los debates".
Un día tonto que no se te ocurra con qué deleitarnos, profundiza un poco en el tema, anda.

patzarella dijo...

¡Pues cómo no ibas a "canturrear" si todo fue de maravilla! jaja Me da mil gusto. Ya sabía yo que así sería ;-)

Gracias por postear esta canción con eso me recordaste muchas cosas. Yo solía cantarla con una amigas hace un par de años si no me equivoco. Era como un himno....

Pongo la letra para que puedan echarle bien un ojo. Es preciosa.

Allegria
Come un lampo di vita
Allegria
Come un pazzo gridar
Allegria
Del delittuoso grido
Bella ruggente pena, seren
Come la rabbia di amar
Allegria
Come un assalto di gioia

Allegria
I see a spark of life shining
Allegria
I hear a young minstrel sing
Allegria
Beautiful roaring scream
Of joy and sorrow, so extreme
There is a love in me raging
Allegria
A joyous, magical feeling

Allegria
Come un lampo di vita
Allegria
Come un pazzo gridar
Allegria
Del delittuoso grido
Bella ruggente pena, seren
Come la rabbia di amar
Allegria
Come un assalto di gioia
Del delittuoso grido
Bella ruggente pena, seren
Come la rabbia di amar
Allegria
Come un assalto di gioia

Alegría
Como la luz de la vida
Alegría
Como un payaso que grita
Alegría
Del estupendo grito
De la tristeza loca
Serena
Como la rabia de amar
Alegría
Como un asalto de felicidad
Del estupendo grito
De la tristeza loca
Serena
Como la rabia de amar
Alegría
Como un asalto de felicidad
There is a love in me raging
Alegría
A joyous, magical feeling

Anónimo dijo...

Pianista, ¿de veras te interesa escucharme/leerme sobre las pretensiones independentistas de una grumúsculo de abogados? Ya pensaré como hacerlo sin parecer caústico.
Patzarella, no sabes como me alegro: muchas gracias por la letra (veo que no me he equivocado al transcribirla, menos mal).

Anónimo dijo...

Hacía tiempo que no oía esa canción... Buena manera de empezar este viernes -lluvioso-.

Tanto congreso, tanta conclusión... para pasárosla los amigos entre birras, cenotas y copas... Pues así yo también me apunto a un follón intelectual de esos ¡¡jaja!!

Pero... por fin ¿llegaste a exponer o se te olvidó o volviste a perder el bus o...? :)

Nodisparenalpianista dijo...

Por favor, lo mejor es que seas cáustico y hasta corrosivo. Prometo acompañarte al piano!!